La solidaridad es un tema que la AHT siempre tiene en cuenta. A través de su Comisión de Solidaridad, realiza acciones y elabora proyectos para generar lazos fraternales con la comunidad.
Dentro de ese marco, la Asociación de Hoteles de Turismo de la República Argentina elaboró un Proyecto de Trabajo para que se declare el Día del Turismo Solidario.
El trabajo fue coordinado por la Comisión de Solidaridad, a cargo de Tony Peró y fundamenta su concreción en que toda actividad humana de dimensión social, y por ende naturalmente la actividad turística, se encuentra llamada a cooperar en la tarea de alcanzar una organización social que se adecue a los lineamientos del bien común, y entre ellos, los de la justicia social.
El turismo resulta una actividad especialmente idónea para contribuir a la realización del bien común; entendiendo por tal no sólo la búsqueda de la justicia social; sino incluso aquel afecto o amistad social que permite la conformación de una sociedad en la que todos sus miembros son en primer lugar hallados dignos de respeto y valoración; y consecuentemente, llamados a cumplir una tarea que, a la par que contribuye a la personal realización de cada quién, coopera para crear una sociedad de vínculos sanos y sólidos, pacífica, creativa y respetuosa; y por consecuencia de todo ello, próspera.
En el Proyecto se destaca que el turismo como vehículo estratégico de la solidaridad, se aprecia una vez que se considera un doble orden de cosas relativas a la actividad turística. El primero de tales es el que refiere las características propias de esta actividad y sector socioeconómico, a saber:
• Su carácter federal, toda vez que los servicios que genera y ofrece son fundamentalmente producidos y comercializados por empresas y personas de cada región, siguiéndose de ello que el resultado de esta actividad beneficia directamente a las economías regionales, lo que conlleva incorporación de progreso y riqueza en modo descentralizado.
• Su carácter multidisciplinario y transversal, por el que adquieren relevancia fundamental las micro, las pequeñas y las medianas empresas, protagonistas principales de esta actividad; sin perjuicio de la también participación de grandes empresas.
• La valoración del medio ambiente, de las riquezas naturales, del patrimonio cultural, religioso y artístico, de la defensa de las idiosincrasias y originalidades de cada región y comunidad, como atributos fundamentales para el desarrollo socioeconómico.
• La alta incidencia en la tasa de generación de empleo, como es propio de aquellas actividades de servicio, que requieren intensiva ocupación de personal.
• La enriquecedora capacitación que la actividad implica para quienes a ella se aplican, pues no sólo es comprensiva de la adquisición de competencias y habilidades propias de los empleos y oficios, sino indispensablemente va unida a la adquisición de nociones, valores y hábitos propios del arte y cultura de la hospitalidad.
La declaración de Día del Turismo Solidario busca promover la práctica de la solidaridad como expresión destacada de una cultura nacional que se funda en la justicia, el amor, y los valores propios de la dignidad humana y el deseo de progreso como verdadera comunidad de destino; reconocer “la importante dimensión y el papel del turismo como instrumento positivo para aliviar la pobreza y mejorar la calidad de vida de todas las personas, su potencial para contribuir al desarrollo económico y social, (…), y su incipiente papel de fuerza vital para la promoción del entendimiento, la paz y la prosperidad” (Conf. ONU, A/RES/56/212); propiciar la identificación y el cultivo de los valores comunes, históricos, culturales, religiosos, artísticos y sociales, en orden al desarrollo de trabajos de colaboración que potencien los beneficios de la actividad turística.
Apreciar la extraordinaria diversidad geográfica y climática, la belleza de sus paisajes, y la riqueza social de cada región, fomentando el cuidado del medioambiente, y su uso responsable de sus recursos; multiplicar las prácticas de de la Responsabilidad Social Empresarial, fomentando la integración de los distintos sectores sociales en la actividad turística y sus beneficios; y fomentar la capacitación técnica y cultural de los artífices directos e indirectos de la actividad turística.
En el proyecto se desprende que las iniciativas y acciones por las que se intentarán concretar los objetivos propuestos, podrán organizarse en cuatro áreas, a saber:
- Donaciones: Aquí se canalizaran aquellas acciones que tengan como centro la entrega de todo tipo de bienes materiales (alimentos, muebles, enseres de cocina, ropa, calzado, ropa de cama, enseres y productos de baño, equipos informáticos, herramientas, maquinaria, materiales de construcción, etc) para las personas o instituciones (escuelas, comedores, hogares de niños o ancianos, hospitales, fundaciones, etc.) que los requieran y fueran previamente seleccionados conforme criterios objetivos.
- Capacitación: Se incluirán las acciones tales como el dictado de charlas, cursos, seminarios, clases o conferencias; la distribución de material bibliográfico en cualquiera de sus formas, el otorgamiento de becas, la celebración de convenios de Pasantía, etc.
- Inclusión: Comprenderá la organización de experiencias inclusivas para con los sectores menos favorecidos de la sociedad y/o las personas y grupos con capacidades diferentes, en situación de vulnerabilidad, tercera edad, niñez, etc, a través de tours, visitas guiadas, paseos, visitas a establecimientos hoteleros y/o gastronómicos y/o estaciones de pasajeros aéreas, fluviales, marítimas, etc.
- Planificación: Contendrá el diseño de actividades y programas para mediano y largo alcance, estudio de diversas fuentes de financiamiento, la participación en el diseño de actividades curriculares para planes de enseñanza, propuestas de proyectos de leyes nacionales o provinciales, ordenanzas municipales, decretos y resoluciones.
Cabe destacar que la iniciativa cuenta con el apoyo del Ministerio de Turismo de la Nación.
Fuente:El Mensajero.
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