A nivel mundial, la resolución de la
ONU invitó a los Estados Miembros de las Naciones Unidas a desarrollar políticasque promuevan el ecoturismo, debido a que sus “efectos positivos repercuten en la generación de ingresos, la creación de empleos y la
educación y, en consecuencia, en la lucha contra la pobreza y el
hambre”, ideas reveladas a través del documento Promoción del ecoturismo para la erradicación de la pobreza y la protección del medio ambiente.
El diagnóstico de la ONU reconoce que “el ecoturismo crea importantes oportunidades de conservación, protección y uso sostenible de la diversidad biológica y de las zonas naturales, al alentar a las comunidades locales e indígenas de los países en que se encuentran y a los turistas a preservar y respetar el patrimonio natural y cultural”.
En el caso de México, el ecoturismo es un término que llegó a México hace unos 15 o 20 años se conforma del turismo que se realiza fuera de las ciudades, enfocado a las áreas rurales tomando en cuenta como eje central a la ecología y el cuidado del medio ambiente, señaló aAltoNivel.com.mx, Bruno Giesemann, director de Argovia finca resort (empresa establecida en Chiapas).
Por su parte, Ernst Riedwyl, Presidente del Club Tesoros de México capítulo Chiapas, conceptualiza al ecoturismo como “una actividad que protege el medio ambiente y está en armonía con lo que nos rodea, no invasiva y de bajo impacto en el ecosistema”.
Y en nuestro país existen diversas actividades que se pueden realizar con el ecoturismo, como por ejemplo, “fotografía, observación, turismo de aventura, caminatas, senderismo,ciclismo, la pesca, que abarca una serie de actividades de acuerdo a la zona. Existe una gama amplia, ya que hay para todos los gustos y para diversas edades”.
De hecho este sector ya se encuentra segmentado en: turismo de aventura, turismo social y turismo ecológico. Sin embargo, el enfoque sigue siendo el geoturismo, paseos o visitas en el área rural y que el objetivo es poner en contacto al visitante con esa área y tratando de valorizar las áreas, comentó Giesemann.
Es decir, lo que busca el geoturismo es que la gente tenga un contacto muy cercano con la naturaleza y que de alguna manera se despierten conciencias.
“Es fundamental que la gente se vuelva a conectar con la realidad, conocer cuál es el origen de los productos que se consumen en su vida diaria y en ese proceso reconocer el valor de la gente está involucrada.
Ecoturismo, un motor de desarrollo para los más pobres
El ecoturismo es un motor para el desarrollo de algunos estados, principalmente, para los de menor desarrollo e incluso para grupos que están culturalmente o socialmente rezagados, mencionó Ernst Riedwyl, Presidente del Club Tesoros de México capítulo Chiapas.
“Muchas veces esos grupos se encuentran de áreas importantes donde se pueden desarrollar el ecoturismo, por ejemplo, en la Selva Lacandona, de los Montes Azules, y es que Chiapas tiene como siete regiones diferentes donde hay reservas naturales”.
Existe un grupo de pobladores olvidados, añadió, que al desarrollar los proyectos se consigue a la vez el desarrollo de la región o del grupo que a su vez, traerá un beneficio económico, al ocupar un mayor número de mano de obra.
“Se ha visto en otros países que la derrama económica es mayor en este tipo de actividades, y que la estancia de los turistas es más amplia”, enfatizó Riedwyl.
En el caso de México, existen diferentes esfuerzos que están realizando la Secretaría de Turismo y también el
Consejo de promoción Turística para impulsar el desarrollo de los proyectos ecoturísticos, entre los que destacan estrategias de difusión para promover los destinos en
caravanas turísticas por los estados de la República Mexicana y también en ferias turísticas internacionales.
Por ejemplo, en el segundo semestre del año se invertirán 5 millones de pesos en la promoción de los puntos turísticos en Quintana Roo, tales como Mahahual, Bacalar, Calderitas,Chetumal, entre otros. Donde pretenderán destacar los atractivos naturales con la arqueología.
Pero, ¿dónde están las oportunidades? El experto afirma que en los estados del sur, como Chiapas, Veracruz, Tabasco y Campeche.
Giesemann asegura que el ecoturismo se enriquece en la zona del sureste de la República Mexicana con el elemento indígena, además de la arqueología, la medicina tradicional, la parte de usos y costumbres, la riqueza histórica que se suman a la belleza del medio ambiente.
Un sector para crear experiencias
“El ecoturismo es una actividad todavía incipiente. Se hizo la Cumbre Mundial de Turismo de Aventura en San Cristóbal de las Casas en Chiapas en el 2011, y aunque fue positiva, nos damos cuenta que hace falta desarrollar muchos de los atractivos y capacitar a las comunidades, darles las herramientas necesarias para que se obtenga un mayor beneficio”, reconoció el Presidente del Club Tesoros de México capítulo Chiapas.
Bruno Giesemann, quien también es uno de los principales promotores de La Ruta del Café, explicó que ésta se creó debido a que había una crisis espantosa en el café de Chiapas, en donde el consumidor de la bebida nunca se enteró de los problemas que tenían los productores, pero a su vez, la crisis propició una nueva forma de ver las fincas con un enfoque ecoturístico.
“Y es que en el Estado, la zona montañosa del Soconusco, las laderas y los altos valles profundos se produce uno de los mejores cafés del mundo”.
Además de desarrollar la Ruta del Café se consigue que con la experiencia del turista despierte la conciencia del peso que tiene a la hora de seleccionar un producto, puede incluso cambiar el día de un agricultor o de una familia, además que “el recorrido permite valorar la vida del campo”, dijo Giesemann.
Pero ahora la zona de la Ruta del Café se está diversificando, actualmente ya hay otros cultivos que se pueden visitar por ejemplo, de flores, follajes, orquídeas, palmas, antulios, se vuelve un mosaico interesante de cultivos tropicales que son muy llamativos y la gente le interesa entender el proceso de cada uno de ellos, mencionó Giesemann.
¿Cuáles son los retos?
Para Ernst Riedwyl, las secretarías estatales en conjunto con la federal y el Consejo de Promoción Turística podrían realizar un esfuerzo importante para desarrollar el segmento del ecoturismo como se ha realizado en Costa Rica.
Enfatizó que para que el ecoturismo funcione se tiene que trabajar en tres ejes: infraestructura, capacitación y promoción.
“La gente requiere conocer los procesos, y con ello, concientizarse que hay municipios, regiones, grupos o familias que requieren de una remuneración correcta para sobrevivir y un paseo turístico puede cambiar la vida de algunos mexicanos”, dijo Bruno Giesemann.
Mencionó que otra oportunidad está en la generación de invernaderos, al incluir nueva tecnología que permita la eficiencia del uso de espacios, pero además de atrapar emotivamente a los turistas se consigue una sinergia con el consumidor.
Bruno Giesemann que el ecoturismo crea una revaloración desde el punto de vista ecológico, social y económico y ello, impulsado por un relación de ganar-ganar. “Cuando las acciones son sustentables, se crea una espiral positiva, porque se consigue una retribución a la zona y a las generaciones que siguen”.
Fuente: Patricia Ortega en Alto Nivel